Dio Entra En La batalla
El Sabio Dio, tras ser invitado a marcharse de Osbourne´s Darkness, se dirigió a su castillo, en las partes mas altas de la Ciudadela de Metalmania. Lo primero que hizo nada mas atravesar el umbral fue llevar su espada a su correspondiente pedestal, que coronaba el Hall de entrada a su morada, y que solo podía ser empuñada por el. Al depositarla en su hendidura, un resplandor dorado emergió de la hoja.
Dio bajó del pedestal y atravesó los pasillos de su castillo para llegar a su sala del Trono, donde solía pasar las horas mientras tenia los pies en su morada. Nada mas cruzar el umbral de la grandiosa sala del trono, adornada con retratos del mismo Dio, individualmente o junto a compañeros suyos, entre ellos Ozzy.
Le recibieron sus dos leales servidores y bufones: JB y Kyle Gass, el grupo mas destacado de bufones en el Metal: Tenacious D. Dio les había guíado desde sus inicios en el mundo del Heavy Metal, y ahora gracias a su cariño y consejo,
Tenacious D servían a Dio en su castillo, aceptados por el mismo, debido a sus increibles labores compositivas ademas de su gran victoria frente al Diablo, ganandole la Púa del Destino.De la misma manera, otro de los grandes del Metal, como lo era Ozzy Osbourne también poseía sus propios bufones: los Glam Metaleros Twisted Sister, que no tenían nada que envidiar a Tenacious D.
Asi pues, al ver llegar a Dio, Tenacious D entonó una de sus mas conocidas melodias bautizada como: “Kickapoo” que así rezaba: “A long ass fuckin´ time ago in the town of Kickapoo”. Dio agradeció la grata bienvenida que le daban sus dos amigos y se sentó en su adornado y rúnico trono de metal, acomodado con una de los mejores materiales del Reino y escuchó las melodias que le dedicaban. Tras un largo rato escuchando con atención las nuevas composiciones de Tenacious D, un hombre de gran envergadura, tez blanca, larga y negra melena y ataviado con ropajes oscuros atravesó el Umbral de la sala del Trono. Sus pasos resonaban en toda la estancia, clavando sus botas en las alfombras, cuando estuvo cerca del trono, inclinó ligeramente el cuerpo y la cabeza en señal de saludo a su señor.
-¡Nathan, ¿que ocurre polluelo?!
Nathan respondió con una voz ronca, grave y tosca:
-Maestro Dio, un cuervo muy brutal quiere entrar al castillo, he dejado a los mios cuidando de que no entrara, ¿Qué quiere que hagamos con el?
-¡Oh no!No le dejes solo con Murderface, corre, que pase.
Nathan asintió y volvió sobre sus pasos con cierta prisa.
Nathan Explosion, líder de Dethklok, banda de Death Metal Melódico con gran renombre en Metalmania, nombrados guardianes de Dio y su castillo debido a sus grandes capacidades de invocación, combate, Metalidad(unidad de medida creada en Metalmania para designar lo que era mas Heavy) y como no Brutalidad, el grupo lo formaban: Nathan Explosion (cantante), William Murderface (bajista), Toki Wartooth (guitarra rítmica), Pickles (batería) y Skwisgaar Skwigelf (guitarra solista).
Mr.Crowley entró timidamente en las estancias de Dio, seguido a varios pasos por el elenco entero de Dethklok. El pequeño cuervo miraba de soslayo al mas bajito y regordete de los cinco, que lucia un espeso cabello afro en forma poligonal y un frondoso bigote. Murderface sin duda, que le miraba relamiendose. Mr.Crowley aceleró el paso hasta llegar cerca de Dio.
-¡Mr.Crowley, que agradable sorpresa!¿que le trae por mi humilde castillo?
-Traigo nuevas de mi amo.
-¡Oh claro, desembucha pequeño!
-Mi amo y señor Ozzy Osbourne ha desenmascarado al falso Halford, que resultaba ser un seguidor del Nu Metal dirigido por Draiman señor.
-¡Fantastica noticia! Ya lo tenemos, JB, Kyle cantar vuestro mejor tema, ¡esto hay que festejarlo!
-Disculpe señor-interrumpió el cuervo- pero hay algo más.
-¿Cómo dices?.
-Asi es mi señor, el amo Ozzy no va a volver esta noche a Metalmania, debido a un posible arrebato de locura quiere exterminar a todos los Nu Metaleros por si mismo, ahora mismo se dirige a los Nuevos Estados de Metalmérica para terminar con esa amenaza-Dio al oír tales noticias saltó de su trono.
-¿¡Como dices!? Es un verdadero suicidio, Tenacious, Dethklok, ¡nos vamos!
-¡Brutal!- dijo Nathan-. Van a rodar unas cuantas cabezas.
Dio, de un gran salto, bajó de su trono aplastando casi al pequeño cuervo, que ahora seguía la carrera del pequeño guerrero, que al llegar al Hall se quedó mirando su legendaria espada, negó con la cabeza, torció a la izquierda, para dirigirse a su arsenal particular. Una vez allí, abrió la puerta de un empujón, dejando a la vista una enorme sala llena de todo tipo de armas. Se puso a mirar a todos los lados buscando la mas adecuada.
-¿Una espada, o quizás una lanza?-dudaba Dio-. No la lanza aun no es mi fuerte-de pronto los ojos de Dio brillaron- esta si ujuju.
De entre todas las armas que había en aquella estancia, Dio agarró un filo reluciente, de colores dorados, y de un afilado que podría cortar la carne como si de papel se tratase, otra de las armas que solamente el podía usar, por el denominada: Axe´s Dio, forjada por el Jinete Guerra en el inframundo, quien sentía un profundo cariño por el pequeño guerrero. Una vez armado, salió de aquella estancia, observando como llegaban sus fieles. Cada uno de ellos armado según sus habilidades. Así pues, salieron a toda prisa hacia Osbourne´s Darkness, donde Randy Roads esperaba la vuelta de su señor, al ver la llegada de tales personalidades como Dio y su séquito acompañados por Mr.Crowley no cesó en su asombro.
-¡Maestro Dio, que sorpresa, ahora mismo el señor…-Dio le corto.
-No hay tiempo para formalidades polluelo, ármate, ¡vamos!
-Pero señor, ¿Qué ocurre, para qué tanta prisa?
-Tu amo y señor acaba de cometer una de sus mayores locuras, meterse en la boca del lobo en los Nuevos Estados de Metalmérica.
-Pero Señor, no hay porque alarmarse, el amo Ozzy es el mejor hechicero de Harmony, no podrán con su poder-Dio, enfurecido le agarró del cuello con los ojos apunto de estallar.
-¡¡Escuchame bien Roads!!He estado en sitios horribles pero esos Estados se llevan la palma, parece un lugar igual que Metalmania pero cualquier esquina es un peligro mortal- al decir esto, Dio se deshizo de su chaleco negro que cayó en el suelo y se levantó la cota de malla de la espalda, mostrando una terrible cicatriz en forma de X.
-Mi señor…¿Cómo…?-Randy se quedó sin habla.
-El alcohol puede ser un fiel amigo, pero también te la puede jugar de la peor manera…cuando bebes demasiado y te encuentas desorientado te da igual donde te encuentres, pero si te encuentras en los Nuevos Estados de Metalmérica, puedo asegurarte que no te dará igual. Gozan de una tecnología mayor a la nuestra, algo de lo que renegamos para mantener nuestras arcanas artes, Ozzy es poderoso no lo pongo en duda, pero no creo que sea capaz de enfrentar tales poderes.
- Si es asi, avisaré a Zack, no tardaré.
Randy tras hablar salió corriendo cual exhalación, mientras que Dio terminaba los preparativos para la partida. Zack Wylde era uno de los mas fornidos Berserkers de Metalmania, vendría bien su ayuda, no tardó en aparecer ataviado de una cota de malla y un peto negro, esgrimiendo una gigantesca maza. Zack , alto cual árbol mostraba en su cara las cicatrizes de las que se dicen 2000 batallas de las que ha salido vencedor, y de su barbilla nacía una trenzada barba rubia cuidada al igual que su cabellera.
Tanto Randy como Zack montaron en el Pegaso de Fuego, única montura permitida a ambos por Ozzy. Ambos portaban sus guitarras a su espalda.Entre tanto, Dio se esfumó de la negra torre en dirección al consejo del Metal, donde esperaba encontrar a James Hetfield, con el cual tenía mayor confianza de los que quedaban en el consejo. En efecto, James estaba sentado en su despacho leyendo unas partituras, quizás para el nuevo álbum de Metallica, Dio irrumpió rápidamente en la estancia.
-¡Maestro Dio!¿que ocurre?
-Hetfield, necesito que mantengas Metalmania como hasta ahora en mi ausencia ¿queda claro?
-Claro pero, ¿A dónde va?
-Top Secret polluelo, todo se sabrá a su debido tiempo, ¿puedo encomendarte esto?
-No se preocupe.
Acto seguido Dio giró bruscamente y se encaminó de nuevo a Ozzy´s Darkness donde el resto le esperaban, y dirigió una frase a Mr.Crowley antes de partir:
- Crowley, vuela alto y todo lo rápido que puedas, avisa a Ozzy de que vamos para allá, que no haga ninguna locura.
-Si señor, no tardaré.
El cuervo alzó el vuelo y a velocidades inimaginables, se dirigió hacia su destino. Dio montó en su fiel Pantera Rayada, y gritó:
-¡¡No os quedéis atrás, vamos!!
La Pantera Rayada saltó de manera estrambótica poniéndose en cabeza, seguido de la Pentamotor de Dethklok, sobrevolada a la vez por el Pegaso de Fuego y el cochambroso coche de Tenacious D. El viaje era de una larga duración por lo que la velocidad con la que avanzaban tenia que ser lo suficientemente potente como para acortarlo lo mas posible, Ozzy les llevaba mucha ventaja. Mr.Crowley, mas rápido que cualquier montura, no tardó en regresar con noticias de su amo.
-No atiende a razones, no va a esperar a nadie.
-Ozzy y su orgullo, al final le va a acabar matando, ¡Randy!- gritó-. ¡Preparaos para saltar a la Power Speed!
Randy asintió. La Power Speed, es una velocidad que solo algunas de las mejores monturas de Metalmania poseian, mas rápida y vertiginosa que la normal, llamada de esa manera por compararla con las grandes velocidades del Power Metal.
-Dethklok, Tenacious D, confiamos en que lleguéis pronto, no os demoréis.
-Si señor- respondieron.
En ese momento Dio y Randy susurraron unas palabras a sus respectivas monturas, el comportamiento de estas cambió de pronto, sus ojos se tornaron rojos y sus musculos estallaron de adrenalina y poder, provocando un gran aceleron en su velocidad punta. Surcaron las tierras de Harmony a velocidades comparadas a la de los Doble Bombos mas endiablados del Power Metal, consiguiendo llegar en la mitad de tiempo a los Nuevos Estados de Metalmérica, disminuyeron su velocidad al entrar en la frontera donde divisaron a un magnífico Ozzy haciendo gala de sus mejores hechizos, rodeado de miles de Nu Metaleros.
-¡¡Morid malditos y sufrid ante el poder de la oscuridad!!
El número de enemigos crecía , nada bueno para el oscuro Ozzy que se centraba en los enemigos terrestres, queriendo sin embargo acabar con las torretas defensivas que lanzaban ráfagas de colores rojizos que hacían grandes cráteres en el suelo cerca de Ozzy. Desafortunadamente, una de las Torres no erró en su objetivo, haciendo que Osbourne cayera dolorido en el suelo. Aun así se alzó, sin ningún rasguño, el poder de la oscuridad le sanó rapidamente su herida. Pero al querer reaccionar era demasiado tarde, estaba rodeado, y apenas podía ejercer un movimiento sin toparse con la nariz de un enemigo. Sin embargo, la carga de Dio llegaba a tiempo para salvarle la palida piel al Hechizero, una gran llama proveniente del Pegaso de Fuego arrasó el flanco derecho del batallón enemigo, lo mismo ocurrió con el izquierdo que quedó calzinado ante un rayo lanzado por Randy, mientras que Dio también tuvo tiempo de cortar un par de cabezas enemigas. Ozzy se irguió y colocandose las gafas dijo:
-Rayos, Fuego y cabezas rodando, como en los viejos tiempos.
Dio sacó su hacha de la cortada cabeza de uno de sus enemigos, miró con una
cansada sonrisa a su compatriota y terminó diciendo:
-Tomate esto como una pequeña ayuda, Ozzy, ¡¡vamos, terminemos con esto!!
0 comentarios:
Publicar un comentario